top of page

¿Cómo inició todo?

  • bayri23
  • 13 jul 2024
  • 2 Min. de lectura

La emoción de un viaje a Panamá empezó a tomar forma cuando decidí planearlo con mi amiga Aída. Extendí la invitación a Rocío, quien aceptó sin titubeos. Elegimos un hostal en la ciudad, buscando un lugar económico y de fácil acceso al transporte público. El hostal resultó ser extremadamente pequeño, pero no nos preocupamos mucho, ya que la mayor parte del tiempo estaríamos explorando la ciudad.



Una tarde, al regresar de una caminata, Rocío se dirigió al dispensador de agua. Allí, un joven comenzó a balbucear algo que sonaba como "AI SVIT AI SVIT". Tras unos segundos, Rocío comprendió que intentaba decir "I sweat, I sweat" en su mal inglés, refiriéndose al calor y al sudor. De alguna manera, comenzaron a comunicarse y terminaron intercambiando cuentas de Instagram. Este joven es alemán y su nombre es Patrick.

Rocío me contó que el joven alemán (Patrick) había alquilado un carro y proponía llevarnos a turistear juntos. Mi reacción inmediata fue de rechazo.



No pude evitar que mi mente dramática imaginara un futuro desastroso en el que este desconocido, con un grupo de amigos vándalos, planeaba robarnos nuestros órganos para venderlos en el mercado negro. Así que respondí con un rotundo no.


A pesar del calor, seguimos caminando hasta que decidimos detenernos a comer y tomar un café. Le comenté a Rocío que, si su amigo nos encontraba, aceptaríamos su oferta de turistear, pero bajo la condición de no revelar nuestra ubicación exacta. Rocío solo le indicó la zona a la que nos habíamos dirigido.


Mientras comíamos, vi a lo lejos a una persona que se acercaba. Era el mismo alemán del hostal, Patrick. No podía creerlo, ¡nos había encontrado!


Pensé que Rocío había roto nuestra condición, pero no había evidencia de ello. Resulta que Patrick estaba enojado porque Rocío no le contestaba, y decidió ir a tomar un café al único lugar abierto en la zona, que coincidía con donde nos encontrábamos.


Finalmente, aceptamos su propuesta y fuimos a pasear por la playa y el canal de Panamá. Al terminar el recorrido, Aída y yo nos despedimos del joven alemán, ya que nuestro tour continuaba hacia otro destino del hermoso país.




El resto de la historia, como dicen, es historia.

 
 
 

Comments


¿Quieres ser parte del equipo de redacción?

¡Gracias por aplicar!

© 2024 Creado por Rubén Santos

bottom of page